Vox y la supuesta ilegitimidad del gobierno
La actitud de Vox ante el gobierno va más allá del rechazo radical a las medidas que este adopte o a los objetivos generales que persigue, sino que, como de nuevo se manifestó con motivo de la comparecencia de Sánchez en el Congreso, impugna la propia legitimidad de aquel, que habría llegado al poder, en palabras de Abascal durante la sesión de investidura del 7 de enero, mediante “un golpe institucional”, cuyo primer acto lo constituiría la moción de censura que apartó del poder al Partido Popular. Sin embargo, dado que tanto la moción de censura como las posteriores elecciones se desarrollaron de acuerdo con lo previsto en la Constitución, la acusación de ilegitimidad carece totalmente de fundamento. No obstante, el hecho de haberla planteado e insistir en ella, es muy revelador acerca de las concepciones de Vox, pues sugiere que para este partido hay una fuente de legitimidad que está por encima de la Constitución y, por tanto, de la ley. No puede aquella ser otra que España, pero e